Pamplona – Bardenas Reales, Monasterio de la Oliva, Tudela, Fitero, Cascante
Bardenas Reales
Las Bardenas Reales son uno de los paisajes más fascinantes de Navarra, caracterizadas por su terreno semidesértico y una belleza salvaje que combina formaciones únicas, como barrancos, mesetas y cabezos. Este Parque Natural y Reserva de la Biosfera abarca 42.500 hectáreas de un ecosistema que asombra tanto por su aridez como por la biodiversidad que alberga. Entre las especies que habitan la zona destacan el águila real y el búho campestre, que conviven en armonía con una flora adaptada a las extremas condiciones del entorno.
Las Bardenas ofrecen a los y las visitantes una variedad de paisajes, desde vastas llanuras hasta formaciones geológicas tan icónicas como el Cabezo de Castildetierra, símbolo del parque. Su peculiar orografía, moldeada por siglos de erosión, ha convertido a este enclave en un escenario natural único, utilizado incluso en producciones cinematográficas. Además de su valor paisajístico, las Bardenas tienen una rica historia asociada a la trashumancia, que aún se practica en la región, y a antiguas rutas comerciales que atravesaban este territorio.
Es importante mencionar que las Bardenas también albergan un polígono de tiro utilizado por el ejército, lo que puede limitar el acceso en ciertas ocasiones debido a las maniobras de entrenamiento. Por ello, se recomienda informarse previamente sobre las condiciones de acceso antes de planificar una visita.
El parque cuenta con una red de rutas señalizadas, ideales para practicar senderismo, ciclismo o simplemente disfrutar de una caminata en un entorno único. También es posible recorrerlo en vehículo por las pistas habilitadas, respetando siempre las normas de conservación del área protegida. La visita es especialmente recomendable durante las primeras horas del día cuando la luz resalta todos los matices del paisaje.
Rutas ciclables dentro del desierto
Explora paisajes impresionantes entre dunas y barrancos, perfectos para disfrutar de la naturaleza y la aventura en dos ruedas.
Cómo llegar desde Pamplona a las Bardenas Reales
En coche
La forma más cómoda y rápida es tomar la AP-15 hacia Arguedas y luego seguir las indicaciones hacia el parque. El acceso principal está a unos 1hora y 15 minutos de Pamplona.
En transporte público
Desde Pamplona, se puede viajar en autobús hasta Tudela. Desde allí, es necesario organizar un traslado adicional hasta el parque, ya que no hay conexión directa. Verifique horarios y servicios antes de planificar su visita.
Monasterio de la Oliva
El Monasterio de la Oliva es uno de los conjuntos monásticos más emblemáticos de Navarra, un lugar de paz que combina historia, arquitectura y tradición. Fundado en el siglo XII por monjes cistercienses, este monasterio se encuentra rodeado de un entorno tranquilo que invita a la reflexión y al descubrimiento. Su iglesia, de estilo románico cisterciense, impresiona por su austeridad y elegancia, mientras que el claustro, la sala capitular y otras dependencias reflejan la vida monástica medieval.
A lo largo de los siglos, este lugar ha sido testigo de eventos históricos, desempeñando un papel relevante tanto en la espiritualidad como en la cultura de la región. Los monjes aún mantienen su presencia aquí, elaborando productos artesanales como vino y licores que puedes adquirir en la tienda del monasterio.
El entorno natural que rodea al monasterio también ofrece oportunidades para paseos y rutas tranquilas, permitiendo disfrutar de la belleza del paisaje rural navarro. Este conjunto monumental es ideal tanto para quienes disfrutan de la historia y el arte como para quienes buscan un momento de desconexión y calma.
Cómo llegar desde Pamplona al Monasterio de la Oliva
En coche
Desde Pamplona, tome la AP-15 en dirección a Tafalla, continúe por la NA-5330 hasta llegar a Carcastillo. El trayecto dura aproximadamente una hora.
Tudela
Tudela es una de las ciudades más importantes y la segunda más grande de Navarra, situada a orillas del río Ebro. Con una historia fruto de la convivencia pacífica entre cristianos, judíos y musulmanes, Tudela combina su rico patrimonio cultural. La ciudad es conocida por su arquitectura medieval, con monumentos tan destacados como la Catedral de Santa María, el Palacio Decanal y su cuidado casco antiguo. Además, Tudela ofrece una maravillosa vida cultural, con festivales y eventos que celebran su tradición, gastronomía y arte.
Tudela es una ciudad con una rica herencia sefardí que se remonta al siglo IX, cuando los primeros judíos se establecieron en la ciudad. Durante la Edad Media, la población judía creció y contribuyó significativamente al desarrollo de la ciudad, consolidándose en dos juderías: la Vétula, situada junto al claustro de la Catedral, y la Nueva, cerca del castillo. En la Judería Vétula destacan calles como Hortelanos, Benjamín de Tudela y Verjas, mientras que la Judería Nueva se encuentra en el Paseo del Castillo y calles aledañas. Estas zonas conservan un encanto medieval lleno de historia. La figura de Benjamín de Tudela, destacado viajero y cronista judío, refuerza la importancia cultural e histórica de esta comunidad en la ciudad.
Construida a finales del siglo XII sobre los restos de una antigua mezquita, la Catedral de Tudela es un emblema de la arquitectura románica y gótica. Declarada Monumento Nacional en 1884, su interior sorprende con capillas decoradas en diversos estilos artísticos y el impresionante retablo del altar mayor. un claustro románico, considerado una joya de la arquitectura medieval, alberga un museo con piezas de gran valor histórico. En el exterior, destacan sus portadas, en especial la Puerta del Juicio, que deslumbra por su complejidad escultórica y simbología.
El casco histórico de Tudela, declarado Bien de Interés Cultural en 1992, combina su riqueza patrimonial con la vida cotidiana de la ciudad. Este conjunto histórico abarca calles estrechas, plazas con encanto y una mezcla de arquitectura tradicional y medieval. Es el corazón de la vida cultural y social de Tudela, donde pasear por sus rincones invita a descubrir siglos de historia en un ambiente lleno de autenticidad.
La ciudad también es famosa por su huerta, una de las más productivas de España, y su gastronomía, donde se destacan los productos frescos de la huerta, como los espárragos y las alcachofas, que dan lugar a una cocina mediterránea deliciosa. El Parque Natural de las Bardenas Reales, cerca de Tudela, también es un atractivo natural cercano que complementa perfectamente la oferta turística de la región.
Además de su patrimonio histórico, Tudela es un excelente punto de partida para explorar la comarca, con rutas de senderismo y cicloturismo que permiten descubrir los encantos de los alrededores, como las huertas y paisajes del Ebro.
Cómo llegar desde Pamplona a Tudela
En coche
Desde Pamplona, el trayecto a Tudela es muy sencillo. Se toma la AP-15 que conecta ambas localidades en aproximadamente 1 hora y 15 minutos, recorriendo unos 95 kilómetros. Si quieres evitar el peaje, tendrás que seguir una combinación de AP-15 con N-121 y NA-134.
En transporte público
Tudela está bien conectada por autobús y tren desde Pamplona. El tiempo de viaje en autobús es de aproximadamente 1 hora y 15 minutos, mientras que el tren puede tardar unos 50 minutos en llegar a la ciudad. Es recomendable verificar horarios y disponibilidad antes de planificar el viaje.
Fitero
Fitero es un encantador municipio situado al suroeste de Navarra, conocido por su rica historia, su patrimonio arquitectónico y su entorno natural. En sus calles se respira el aire de siglos de tradición, con monumentos como el Monasterio de Santa María la Real, un conjunto arquitectónico impresionante de origen medieval. Fitero también es famoso por sus aguas termales, un atractivo que se remonta a tiempos romanos. El Balneario de Fitero, en particular, es famoso por sus instalaciones modernas y su enfoque en el bienestar y la salud. Con un amplio abanico de tratamientos que aprovechan las propiedades beneficiosas de sus aguas, este balneario se ha establecido como un refugio ideal para quienes buscan relajación y terapia.
El paisaje que rodea Fitero ofrece una gran variedad de rutas de senderismo, que permiten descubrir la belleza del entorno, mientras que sus festivales y celebraciones, como las fiestas en honor a San Sebastián, hacen del municipio un lugar mágico y lleno de vida. Fitero también es ideal para las personas amantes de la gastronomía, con una oferta que destaca por los productos locales, como el aceite de oliva y el vino.
La combinación de patrimonio cultural, recursos naturales y tradiciones convierten a Fitero en un destino perfecto para quienes buscan disfrutar de la tranquilidad y belleza de Navarra.
Cómo llegar desde Pamplona a Fitero
En coche
Desde Pamplona, el trayecto hasta Fitero es de aproximadamente 1 hora y 10 minutos. Se toma la carretera AP-15, y si quieres evitar el peaje, puedes combinar la ruta con NA-160, hasta llegar a la localidad, recorriendo unos 100 km.
En transporte público
Fitero se encuentra conectado por autobús con Pamplona haciendo escala en Tudela. El tiempo de viaje varía, por lo que es recomendable consultar los horarios antes de viajar.
Cascante
Cascante es una localidad que se encuentra en la Ribera de Navarra, rica en historia y tradición. La ciudad de Cascante fue un antiguo poblado fortificado celtibérico, siglos II-I a.C., que se convirtió en un importante enclave romano (Cascantum) en el siglo I a.C. Además, se ubicaba sobre la vía romana que unía Caesaraugusta con Asturica Augusta. Llegó a acuñar moneda tanto en época celtibérica como romana.
Durante la época romana, Cascantum alcanzó el estatus de municipio con derecho latino, otorgado por el emperador Augusto hacia finales del siglo I a.C., lo que marcó un importante desarrollo urbano y administrativo. Este privilegio permitió la acuñación de monedas de bronce, como ases y semises, durante el reinado de Tiberio, consolidando su posición como un núcleo económico y cultural destacado en el norte de Hispania.
Los hallazgos arqueológicos en la ladera del Santuario de Nuestra Señora del Romero, como el pavimento de opus signinum y ánforas de vino, atestiguan su prosperidad en la época romana. Además, Cascantum es mencionada por autores clásicos como Ptolomeo, Plinio y Tito Livio, reafirmando su relevancia histórica dentro del Convento Jurídico Cesaraugustano.
En su casco antiguo podemos encontrar la iglesia de Nuestra Señora de la Virgen del Romero. Construida sobre las ruinas de una iglesia románica del siglo XII, está considerada como un edificio icónico de Cascante. En dicho interior se pueden encontrar dos tipos diferentes de bóvedas y una apabullante cúpula adornada de dorado. Un claro exponente del arte barroco fruto de su apogeo durante la Edad Media.
Al valor histórico-artístico del conjunto se suma el entorno natural del parque del Romero donde se ubica el santuario. Construido a modo de atalaya resulta un mirador privilegiado del valle del Queiles y el Moncayo.
Además, Cascante está marcada por su entorno agrícola, compuesto por campos de cultivo y parajes naturales, que ha sido testigo de una tradición vitivinícola y gastronómica que se refleja en sus festividades, como la Semana Cultural o la Fiesta del Romero. El municipio es también un excelente punto de partida para descubrir otros rincones de la comarca, incluyendo su conocida tradición en el cultivo de espárragos.
Cómo llegar desde Pamplona a Cascante
En coche
El trayecto en coche hasta Cascante desde Pamplona es de aproximadamente 1 hora y 15 minutos, recorriendo unos 105 km por AP-15 o unos kilómetros más por la N-121.
En transporte público
Cascante está conectado por autobús con Pamplona haciendo conexión en Tudela, con un tiempo de viaje que varía según el servicio, por lo que es recomendable consultar los horarios.