Ruta de San Fermín
Las fiestas de San Fermín se celebran anualmente del 6 al 14 de julio en Pamplona. Aunque su apogeo se vive en esas fechas, la esencia de San Fermín impregna la ciudad durante todo el año. Desde el siglo XII, existen registros de celebraciones religiosas en honor a San Fermín de Amiens, considerado el primer obispo de Pamplona. En el siglo XIV, se incorporaron las primeras ferias y corridas de toros, consolidando una tradición que ha evolucionado hasta convertirse en una festividad alegre, cultural y participativa, reconocible por la vestimenta blanca y el distintivo pañuelo rojo.
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El Encierro: adrenalina pura
La carrera comienza en la cuesta de Santo Domingo, donde los toros pasan la noche previa en los corrales, tras ser trasladados desde los Corrales del Gas. En este punto se encuentra el Espacio SanfermIN! Espazioa, en el acto conocido como el Encierrillo. Antes de iniciar la carrera, los corredores se encomiendan a San Fermín con un canto frente a su hornacina en la cuesta.
El recorrido continúa hacia la plaza Consistorial, lugar que es también escenario del Chupinazo, el acto que cada 6 de julio a las 12h reúne a miles de personas para dar inicio oficial a las fiestas.
Al llegar a la calle Mercaderes, quienes participan enfrentan la famosa curva que conecta con la calle Estafeta, donde la emoción se mezcla con el peligro debido a posibles resbalones de los toros. Finalmente, la carrera culmina en la Plaza de Toros, que ofrece visitas guiadas durante todo el año. Frente a la plaza, el Monumento al Encierro, obra de Rafael Huerta, captura en bronce la intensidad de este momento único, representando a seis toros, tres cabestros y diez corredores.
San Fermín y su presencia en la ciudad
La iglesia de San Lorenzo, situada al final de la calle Mayor, es una parada imprescindible. Este templo alberga la capilla de San Fermín, donde se encuentra el busto relicario del santo, tallado en el siglo XV. Su fachada, diseñada por Florencio Ansoleaga en 1901, es un testimonio del patrimonio arquitectónico de la ciudad.
Las calles de Pamplona también reflejan la esencia de los Sanfermines a través de tradiciones como los bailes de la Comparsa de Gigantes y Cabezudos, la música de La Pamplonesa, banda municipal que anima cada rincón durante las fiestas, y las actividades de las peñas, agrupaciones sociales que dan vida a la ciudad desde sus locales distribuidos por toda la ciudad.
Los Sanfermines no solo se viven del 6 al 14 de julio, su espíritu está presente en cada rincón de la ciudad durante todo el año. Pasear por Pamplona es revivir sus tradiciones, sentir la pasión de su gente y descubrir por qué esta fiesta es una de las más reconocidas y queridas a nivel mundial. El Espacio SanfermIN! Espazioa es el lugar ideal para conocer la esencia de la fiesta.